Más de 11 millones de niñas podrían no volver a la escuela después del COVID

Ese es el número de niñas que podrían no volver a la escuela este año debido a la interrupción sin precedentes de la educación provocada por la COVID-19. Esta alarmante cifra no sólo amenaza décadas de progreso hacia la igualdad de género, sino que también pone a las niñas de todo el mundo en riesgo de embarazos adolescentes, matrimonios precoces y forzados, y violencia. Para muchas niñas, la escuela es más que una llave para un futuro mejor. Es un salvavidas.

A medida que algunas escuelas e instituciones educativas a lo largo del mundo vuelven a abrir sus puertas, y otras se preparan para hacerlo, los Gobiernos, los funcionarios del sector educativo, los líderes comunitarios, los docentes y el personal escolar deberían ver esta situación como una oportunidad para reforzar la igualdad a través de medidas con perspectiva de género que transformen los sistemas educativos, den prioridad a la resiliencia, y aborden los principales obstáculos y limitaciones para la educación de las niñas.

Las crisis pasadas demuestran que las niñas son particularmente vulnerables ante cierres escolares prolongados. Se ha establecido que el cierre de escuelas exacerba el trabajo de cuidado no remunerado de niñas y mujeres, limitando su tiempo disponible para estudiar en sus hogares.5 La desigualdad de género en el ámbito digital, y el acceso limitado de las niñas a la tecnología de la información y la comunicación (TIC), incluso en contextos con una amplia cobertura de telefonía móvil e Internet, también se refleja en menores oportunidades de aprendizaje durante el cierre de escuelas.

Las cuarentenas relacionadas con la COVID han aumentado la exposición de muchas niñas a la violencia de género,7 incluyendo la explotación sexual8 y los embarazos precoces y no deseados,9 reduciendo al mismo tiempo el acceso a servicios vitales para la protección, la nutrición, la salud y el bienestar.

Las estimaciones de pérdidas de conocimientos adquiridos sugieren que un 25 por ciento más de estudiantes pueden encontrarse por debajo del nivel básico de conocimientos necesarios para participar de manera efectiva y productiva en la sociedad y en futuras oportunidades de aprendizaje.

Además de las pérdidas de conocimientos adquiridos, la UNESCO ha estimado que, a nivel mundial, 23,8 millones de niños, adolescentes y jóvenes, desde la educación preescolar hasta la terciaria, podrían llegar a abandonar sus estudios o no tener acceso a la educación en el próximo año debido únicamente al impacto económico de la pandemia, incluidos 11,2 millones de niñas y mujeres jóvenes.11 Otras estimaciones suponen una cantidad aún mayor, con 20 millones de niñas y mujeres jóvenes en países de ingresos bajos y medios bajos.12 Si bien las cifras aún no están confirmadas, está claro que los cierres escolares debidos a la COVID-19 tendrán efectos devastadores en el futuro de las niñas, así como efectos intergeneracionales en la salud y la nutrición, el crecimiento económico y muchos otros ámbitos.

Únase a la UNESCO y a los miembros de la Coalición Mundial para la Educación en la nueva campaña de #LaEducaciónContinúa, para garantizar que todas las niñas puedan aprender mientras las escuelas estén cerradas y volver a las aulas cuando las escuelas abran de nuevo de forma segura. Hablemos en nombre de las 130 millones de niñas que ya estaban fuera de la escuela antes de la pandemia, y trabajemos juntos para salvaguardar su derecho a la educación. Es hora de convertir esta crisis en una oportunidad para reconstruir la igualdad.

La educación de las niñas es nuestro futuro

Cuando se interrumpe la educación de una niña, el impacto puede sentirse durante generaciones. Deja una brecha irreemplazable en su comunidad, en su país y en el mundo.

La educación de las niñas es una de las inversiones más poderosas que podemos hacer para nuestro futuro. El efecto dominó de cambio positivo que ocurre cuando una niña recibe una educación es sorprendente. Fortalece las economías, reduce la desigualdad y crea más oportunidades para que todos tengan éxito.

Con información de la UNESCO.

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