Día internacional de la igualdad salarial

La Organización de las Naciones Unidas proclamó el 18 de septiembre como Día Internacional de la Igualdad Salarial a fin de visibilizar la importancia de equipar la retribución económica por un trabajo de igual valor.

En la actualidad persiste la desigualdad de género, debido a circunstancias históricas y estructurales de las sociedades, destacando que la remuneración salarial percibida por las mujeres es inferior a la de los hombres, determinando a nivel mundial una brecha salarial de género del 23%.

El derecho a la igualdad de remuneración entre hombres y mujeres por un trabajo de igual valor, recibe habitualmente la denominación de “igualdad salarial”, y es el principio diseñado para alcanzar la equidad salarial entre hombres y mujeres. La equidad salarial es una cuestión de justicia remunerativa y un indicador del avance de los derechos humanos de las mujeres.

La igualdad salarial entre mujeres y hombres es fundamental para alcanzar los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en específico en el Objetivo 5: “Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas”. Algunas de sus metas son:

Asegurar la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de oportunidades de liderazgo a todos los niveles decisorios en la vida política, económica y pública.

Aprobar y fortalecer políticas acertadas y leyes aplicables para promover la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas a todos los niveles. Aunado a ello, el reporte de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Informe Mundial sobre Salarios 2018/19 ¿Qué hay detrás de la brecha salarial de género?, ofrece una evaluación detallada de las desigualdades de remuneración por razón de género, para comprender mejor la brecha salarial como una de las mayores injusticias sociales persistentes en el mundo laboral. Dentro de este informe se constata que, a escala mundial, las mujeres siguen percibiendo un salario aproximadamente 20% inferior al de los hombres. En el caso de México, la brecha es del 15.6 por ciento.

En 1993, en México la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) creó la Coordinación del Programa sobre Asuntos de la Mujer, la cual se transformó en 2006 en el Programa de Asuntos de la Mujer y de Igualdad entre Mujeres y Hombres (PAMIMH), adscrito a la Cuarta Visitaduría General. A través de este programa, la CNDH se enfoca en tres vertientes:

1. Observancia del seguimiento, evaluación y monitoreo, de la Política Nacional de Igualdad entre Mujeres y Hombres (PNIMH), para proponer mejoras, en un diálogo constructivo con las instituciones encargadas de cumplirla.

2. Promoción de los derechos humanos de las mujeres y proporcionar herramientas a las/los servidoras/es públicas/os para que ejerzan sus funciones atendiendo a la perspectiva de género (PEG).

3. Atención de quejas por presuntas violaciones a derechos humanos de las mujeres basadas en discriminación de género.

Con información de la Organización de las Naciones Unidas.

Relacionados
Cómo evitar y prevenir los factores de riesgo psicosocial en el trabajo

En el mundo laboral actual, la salud mental de los trabajadores se ha convertido en un tema prioritario para las …

Acciones que implementarán las empresas para no incurrir en explotación laboral

La capacitación y formación es el recurso adicional que más demandarán las empresas para el cumplimiento de la reforma a …

Elementos claves en una negociación en el entorno laboral para mujeres

Esperamos que nuestros jefes o jefas nos reconozcan los logros y nos den un aumento de salario en lugar de …