¿Qué es el mobbing y cómo identificarlo?

Algunas empresas en la actualidad han implementado cierto tipo de medidas y estrategias para contribuir en el bienestar de los empleados, pero otras pueden no estar haciendo lo mejor.

De manera particular, en los grupos de trabajo o entre los mismos empleados, se pueden llegar a presentar ciertas actitudes y comportamientos que merman la autoestima de los integrantes y en consecuencia su productividad.

Este tipo de comportamientos en las empresas se le ha denominado como Mobbing laboral, el cual, de acuerdo con cifras de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), lo sufren uno de cada cinco empleados y que puede causar grandes pérdidas en las compañías.

¿Cómo se da el mobbing laboral?
El mobbing laboral es un patrón de comportamiento hostil dirigido hacia una persona en el lugar de trabajo, se manifiesta a través de acciones como la intimidación, el desprestigio, la exclusión y la difamación.

Yunue Cárdenas, Coordinadora del HUB de psicología de Affor Health, señala que este fenómeno genera un clima laboral tóxico que provoca disminución en la autoestima y la satisfacción laboral.

Una persona que es víctima de mobbing puede experimentar estrés, ansiedad, depresión, frustración, insomnio, fatiga, disminución de la autoestima, cambios en el comportamiento y aislamiento, entre otros.

El mobbing puede desarrollarse en diversas formas, como puede ser desde los puestos de alta jerarquía a los subordinados, entre empleados con el mismo rango de jerarquía y en raras ocasiones, de los subordinados a su jefe inmediato.

En México, la Suprema Corte de Justicia señala que la intención es intimidar, opacar, aplanar, amedrentar o consumir emocional o intelectualmente a la víctima.

Algunas señales de mobbing laboral son:

Preferencias de los mandos por alguno o algunos empleados específicos
Toma de decisiones arbitrarias y sin fundamento hacía un miembro del equipo, que fueron discutidas con todos menos con la víctima.
Sobrenombres o apodos por parte de los compañeros de trabajo con demasiada frecuencia y que buscan exaltar los defectos de la víctima.
Cargas de trabajo excesivas hacía un empleado específico.

Las consecuencias del mobbing laboral son:

Ausentismo y rotación de personal: El acoso laboral puede inducir a las víctimas a faltar al trabajo, incluso, renunciar debido al estrés y la ansiedad asociados. Esto resulta en una rotación de personal más frecuente, lo que a su vez implica gastos adicionales relacionados con la contratación y capacitación de nuevos empleados.

Caída de la productividad: El ambiente laboral negativo generado por el mobbing inhibe el desempeño de los empleados y afecta su productividad y calidad del trabajo. Los empleados acosados tienden a estar distraídos, desmotivados y menos comprometidos con sus responsabilidades, lo que resulta en una disminución en la eficiencia operativa y un aumento en los errores.

Costos legales y reputacionales: Las organizaciones enfrentan el riesgo de enfrentar demandas legales y daños a su reputación como consecuencia del acoso laboral. Los procesos judiciales pueden resultar en costos económicos significativos en términos de indemnizaciones y compensaciones, además de provocar un daño irreparable a la imagen y la credibilidad de la empresa.

Con información de Hanzel Forteza, El Heraldo de México.

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