El impacto de los días lluviosos en la productividad
La lluvia tiene un impacto multifactorial en la productividad, los efectos en el estado de ánimo y hasta el caos vial ocasionado por inundaciones, tienen un impacto en las personas y la dinámica laboral.
Los días de lluvia se suelen asociar con un momento de melancolía, romanticismo u ocio; pero influyen mucho en la productividad de la fuerza laboral. Las condiciones climáticas adversas afectan el estado de ánimo y la motivación de los trabajadores.
Ivonne Borden, fundadora de Agregando Valor, comenta que la lluvia tiene un impacto en la productividad desde un punto de vista psicológico y emocional, especialmente en el ambiente donde las personas realizan sus actividades cotidianas, como el trabajo.
Esto ocurre, de acuerdo con Affor Health, porque el cerebro humano está diseñado para reaccionar ante las amenazas del ecosistema, incluyendo el clima. Por ello, se activa una respuesta de huida o defensa en el inconsciente. Si bien este mecanismo es útil para prevenir peligros, puede resultar perjudicial en el trabajo cuando se prolonga durante temporadas de lluvias.
“El ambiente laboral se ve afectado por el clima más de lo que pensamos. Las personas somos seres emocionales. Aunque algunas personas disfrutan los días lluviosos generalmente el tiempo nublado puede hacernos sentir más melancólicos”, comenta Borden.
La Asociación Americana de Psicología señala que en los días lluviosos los trabajadores pueden experimentar una disminución de la energía debido a la atmósfera nublada y sombría.
Sin embargo, la especialista indica que los efectos psicológicos pueden variar dependiendo las experiencias de cada trabajador, siendo el grado de impacto de la lluvia diferente para cada persona.
Generalmente, los días lluviosos pueden provocar recuerdos o emociones que distraen, por lo que es crucial estar consciente de cómo estos factores psicológicos afectan el desempeño.
En ese sentido, Affor Health señala que es importante que las empresas tengan en cuenta la problemática de la lluvia y del caos que conlleva, para brindar apoyo psicológico adecuado, promoviendo estrategias de manejo del estrés y la ansiedad para sobrellevar las adversidades que los trabajadores se enfrentan durante estas temporadas.
En cuanto al impacto en aplazar la ejecución de tareas, Ivonne Borden aclara que los días de lluvia no siempre conducen a una mayor procrastinación, pero pueden aumentar la tendencia a posponer tareas en algunos casos.
En zonas urbanas, done se concentran muchas empresas y hay una mayor densidad poblacional, la lluvia intensifica el caos metropolitano, haciendo que el tráfico sea más denso y el transporte público se congestione. Este aumento del estrés externo se traduce en un impacto negativo en la capacidad de concentración y eficiencia de los empleados.
Affor Health indica que la combinación entre la lluvia y el caos vial de una ciudad crea un sentimiento de incertidumbre y frustración, debido a que no se sabe a qué hora exacta se puede llegar a los lugares de trabajo. Además, se enfrenta la necesidad de planificar rutas alternas, el riesgo creciente de accidentes viales, y el simple hecho de lidiar con el tráfico intenso, afecta la salud mental
“La falta de luz solar suele contribuir a un estado de ánimo más serio y sobrio, e incluso puede causar sentimientos de soledad. Además, el tráfico también se ve afectado, lo que puede añadir estrés adicional”, afirma Ivonne Borden.
A decir de Affor Health, las afectaciones más comunes de la lluvia en el contexto laboral son:
Disminución de la productividad por una menor capacidad de concentración y desempeño individual
Mayor ausentismo, ya que las personas prefieren permanecer en casa, y en escenarios de fenómenos meteorológicos, se prioriza quedarse en el hogar para prepararse
Desmotivación, por el impacto en el estado de ánimo de las personas.
Motivación en días de lluvia
Una alternativa para evitar que los días lluviosos afecten la dinámica laboral, es cuidar la iluminación en el espacio de trabajo. Por ejemplo, la luz blanca, que es fría, puede causar irritabilidad; mientras que la luz cálida, como la luz amarilla, tiende a crear un ambiente más acogedor; y la luz azul de los dispositivos puede mantener a su usuario en un estado de alerta excesiva.
Terrapin sugiere que mantener una iluminación indicada en la oficina con colores principalmente brillantes y llamativos e incluir plantas o elementos naturales mejora el estado de ánimo de la fuerza laboral y crea una atmósfera positiva.
Además de la iluminación, la cultura organizacional y el papel de los líderes son fundamentales para mantener la productividad laboral durante los días lluviosos. La psicóloga Ivonne Borden recomienda establecer prioridades claras y mantener una estructura de trabajo definida para mitigar los efectos nostálgicos de la lluvia. “Tener tres tareas no negociables al día puede ayudar a mantener el enfoque y reducir la procrastinación”, señala.
Una recomendación adicional, es organizar tareas y actividades de interacción para promover la cohesión y el compromiso de los equipos durante la temporada de lluvia. La especialista puntualiza que los líderes pueden hacer una gran diferencia proporcionando flexibilidad en los horarios, especialmente en estos días.
“Permitir que los empleados lleguen más tarde o trabajar desde casa puede reducir el estrés relacionado con el tráfico y las dificultades de transporte. Además, promover un ambiente de trabajo flexible puede mejorar la moral y la productividad en general”, explica.
Ser consciente de cómo la lluvia puede afectar el estado de ánimo y la motivación permite a los líderes y empleados tomar medidas proactivas para gestionar estos efectos.
En el caso del teletrabajo, la NOM 037 recomienda reportar cualquier problema relacionado con la conexión de internet o falta de energía eléctrica por fuerza mayor, para que no afecte la evaluación del desempeño. Es crucial mantener un entorno de trabajo en casa confortable para laboral y conservar la productividad durante los días lluviosos.
Las organizaciones pueden mejorar el bienestar y la productividad de su fuerza laboral en condiciones climáticas adversas, la flexibilidad horaria, el diseño adecuado del espacio de trabajo y la consciencia emocional son factores claves para conservar un ambiente laboral productivo y saludable.
Con información de Ricardo Ramírez, El Economista.↵
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